Nota enviada a nuestro mail por Agustín Weisbek

                Querido Diego, esta carta que te escribo es para pedirte que te quedes, no te vayas, quedate para siempre donde estas. Ojala pudiera volver el tiempo atrás y verte jugar al futbol, divirtiéndote siendo el mejor de todos, tratando a la pelota mejor que ninguno en toda la historia.  Como el tiempo no se puede volver a atrás, me conformo humildemente con verte parado en el banco de suplentes, conduciendo a una selección de jugadores extraordinarios, dirigiendo con tus conocimientos –porque nadie mejor que el mejor jugador de todos los tiempos para conocer de futbol- , motivando con tus palabras y con la pasión que vos tenés por este deporte que es más que eso en nuestro país.

                Diego amado, idolatrado, endiosado…quedate, no te vayas. Verte como te vi, como te vimos todos,…sereno, tranquilo, pensante, estratega, motivador, paternalista, amigo, compañero…un jugador mas. Verte así es el fruto de una larga lucha, llena de derrotas personales y de aprendizajes importantes. Yo quiero seguir viéndote así, quiero seguir llenándome de orgullo de ser argentino porque Dios es argentino. No me gustan los que se van al vestuario sin llorar, no me gustan los poco eufóricos, no me gustan los que se callan ante los periodistas, no me gustan los chupamedias del poder de turno, no me gustan los que critican a los jugadores porque tienen el pelo largo, no me gustan los que hacen trampa para poder ganar, no me gustan los que se venden, no me gustan los que desconocen el sentimiento popular. Por eso te quiero a vos…porque vos sos genuino, sos auténtico, sos especial, sos justo, sos ganador, sos rebelde, sos contestador, sos eufórico…vos sentís la camiseta argentina más que cualquier otro argentino.

                Quienes te llaman “fracasado” son los mismos que te la mamaron antes y te la van a chupar siempre. Quienes piden tu cabeza son los mismos de siempre, los que nunca se equivocan, los seres superiores, los que saben de futbol y jamás lo jugaron o quienes nunca te llegaron ni a los talones. No los escuches, escuchá al pueblo argentino que, a pesar de volvernos con un 4 a 0 en contra, cantaban tu nombre y te pedían lo mismo que te estoy pidiendo yo: que no te vayas, que no dejes de ser el técnico de Argentina. Porque si vos te vas lo conseguido en 1 año y medio va a quedar en la nada, si vos te vas la selección nacional se va a quedar sin referente, si te vas le vas a dar la razón a los panqueques que la siguen teniendo adentro, si te vas no habrán valido la pena los partidos contra Nigeria, Corea, Grecia y México. Y yo no quiero que pase eso, quienes te amamos y queremos verte bien, no queremos darle la razón a los Passman, a los Fantinos, a los Sanfilippos, a los Clarinistas, a los Gendlers, a los Rossis, a los Niembros, a los Vilas, a los La Volpes, a los Paganis…y tantos otros infelices y poco serios mamadores profesionales. Demostrales y demostranos que con trabajo; con perseverancia; con tranquilidad; con abrazos; con amor; con futbol, vos podés llevarnos de vuelta a la gloria, podes dejar en claro que son las mentiras españolas o los chamuyos alemanes.

                No te vayas Diego, quedate en tu casa para siempre. La vida te da revancha y vos de revanchas sabés mucho…no te caigas, abrazá el amor que te dan muchos, escucha atentamente a los que están en contra tuyo porque hasta de ellos podes aprender cosas, cosas que no son dignas de enseñar en una cancha de futbol. En 4 años tenés la posibilidad, sin presiones ni excusas, de mostrar cuánto ha mejorado y crecido nuestra selección argentina. Mientras llegue ese momento, sé feliz y brindá la pasión que vos tenés, enseñá buen futbol, seguí creciendo vos también a la par de Messi, de Tevez, de Masche, de Jonás, de Di María, de Maxi, del Pipita, de Pastore, de Bolatti, de Demichelis, de Otamendi, de Clemente, de Burdisso, de Romero, de Milito, de Agüero…a la par de esas fieras –como vos bien las llamaste-, fieras argentinas que también tendrán revancha.

                Te lo vuelvo pedir Diego…quedate, no te vayas. Bendito seas entre todos los jugadores y entrenadores de este mundo, bendita tu historia, tu condición, tu amor por la celeste y blanca….bendito seas Maradona.